En palabras simples diremos que es una disciplina que emplea conocimientos de diversas áreas de la psicología con el objetivo de brindar información científica que permita a los Jueces realizar análisis más estructurados de las declaraciones que los testigos vierten en los juicios que ante ellos se ventilan.
¿Cómo debe hacerle un juez para creerle a un testigo? Esa es la gran pregunta a resolver, ¿Con base a su intuición? ¿Sentido común? ¿Análisis de expresiones corporales? ¿Apelar a la honestidad de la persona que declara? o en su caso incorporar a su análisis premisas que permitan realizar un discernimiento mas detallado que pase un filtro lógico, psicológico y probabilístico, mas allá de sesgos personales.
En las diferentes legislaciones que regulan las múltiples áreas del derecho se asignan estándares probatorios que obligan a los juzgadores a emitir resoluciones que estén alineadas a estos, de no respetarse, las sentencias carecerían de validez. A través de los años estos “niveles de valoración han cambiado” y por supuesto la manera de razonar las pruebas también y esto se debe a que disciplinas como la psicología, la neurolingüística entre otras, han realizado aportaciones significativas, por ejemplo, recuerden que en materia penal “nadie puede ser condenado más allá de toda duda razonable” y justo lo razonable respecto a la declaratoria de culpabilidad debe sobre pasar a la presunción de inocencia, derecho humano que impide que se dicte una sentencia bajo un esquema de probabilidad prevaleciente (50% +1), ya que exige una valoración estricta que disminuya los errores de condenar a un inocente o absolver a un culpable.
Dicho lo anterior, todos los juristas estamos obligados a conocer los temas que estudia la psicología del testimonio, el relato, el hecho y la memoria, y la correspondencia entre estos, desde un enfoque científico que permita llevar a juicio testigos veraces, el propósito es abandonar malas praxis judiciales de llevar testigos falsos, que sin duda serán evidenciados a la luz de la psicología del testimonio, o incluso, evitar tener prácticas que impidan conocer la verdad, como por ejemplo contra interrogatorios violentos u objeciones exageradas, ya que el juez que incorpore a su haber conocimiento científico multidisciplinario tendrá mayores probabilidades de detectar este tipo de situaciones tan reprobables y actuar en pro de la justicia sin ser sorprendido por postulantes fachendosos.
En México hay antecedentes resueltos por nuestra Suprema Corte de Justicia que han reconocido a la psicología del testimonio como una disciplina científica capaz de aportar herramientas metodológicas para el análisis de la declaración de personas adultas, incluso de los niños y con apego al interés superior del menor, véase el amparo 3797/2014. Esto es una realidad en el mundo jurídico mexicano.
Por todo lo anterior hemos convocado al Dr. Juan Fernando González Porras quien cuenta con mas de 20 obras publicadas en torno a la psicología, a los testigos, a pruebas periciales etcétera, es simplemente un experto que nutrirá la clase de conocimiento científico, de experiencias que derivan de los sendos estudios realizados en la materia en cuestión para que nos acerque de manera magistral aun tema por demás interesante, novedoso, y apasionante.
No de sesiones: 1
Ponente:
Dr. Juan Fernando González Porras, criminólogo y abogado.
Temario:
1. ¿Qué es la psicología del testimonio?
2. Medicina legal.
3. Criminalística y Criminología.
4. ¿Cómo se integran con la psicología y neurociencias?
